Préstamo (s. XIII) del latín cathedra ‘silla’ y este del griego kathédra ‘asiento’. Del mismo origen que cadera desde donde el catedratico impartia la leccion a sus dicipulos. (V.), con mantenimiento del significado original. Se fijo para nombrar al profesor que imparte una materia.
Fuente: Pasapalabra.
Republicado Por: Isabel Reyes de Iglesias.
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